Creatividad y Rendimiento Académico en Estudiantes de Psicología de la UNMDP
Fecha
2018-06-27Autor
De Paulis, Julieta
Luciano, Valentina
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
Tradicionalmente la psicología se ha orientado hacia el estudio y comprensión de las
patologías y las enfermedades mentales, reduciéndose así a una visión pesimista (Csikzentmihalyi & Seligman, 2000). En tal sentido, se han descuidado los aspectos positivos que por naturaleza propia tienen las personas, tales como el bienestar, la satisfacción, la esperanza, el optimismo, la felicidad, entre otros. La Psicología Positiva es una rama de la psicología de reciente aparición que busca comprender y estudiar, a través de la investigación científica, estos aspectos positivos, así como los procesos que subyacen a las fortalezas y virtudes del ser humano. Existe consenso en considerar que el inicio de la Psicología Positiva se señala en 1998 con el discurso inaugural de Martin Seligman como presidente de la American Psychological Association (APA) (Seligman, 1999). Csikszentmihalyi y Seligman (2000) mencionan que el campo de la
Psicología Positiva, a un nivel subjetivo refiere a las experiencias: bienestar, alegría y satisfacción (en el pasado); esperanza y optimismo (para el futuro); y fluir y felicidad (en el presente). A un nivel individual refiere a los rasgos individuales positivos: capacidad de amar, vocación, perseverancia, perdón, originalidad, visión de futuro, espiritualidad, talento, sabiduría. A un nivel grupal, refiere a las virtudes cívicas y las instituciones: responsabilidad, altruismo, moderación, tolerancia, ética. La preocupación y el interés por el estudio del bienestar humano y los factores que contribuyen al mismo, no es exclusividad de la Psicología Positiva; sin embargo Seligman tuvo la virtud de identificar estas tendencias, nombrarlas y adaptarlas a los cánones ortodoxos de la ciencia,
organizándola en una estructura programática e impulsando su investigación y difusión (Gancedo, 2008; Harrington, Joseph, Linley & Wood, 2006). Vera Poseck, Begona Carbelo & Vecina Jimenez (2006) aseveran que desde la Psicología Positiva se recuerda que el ser humano tiene una remarcable capacidad de adaptarse, de encontrar sentido y de crecimiento personal ante las experiencias traumáticas más terribles. En el terreno de la Psicología, los antecedentes de la Psicología Positiva deben buscarse en los escritos de Allport (1958), William James (1902), y en los autores de la denominada Psicología Humanística, entre otras fuentes. Pueden citarse como referentes importantes los trabajos de autores como Deci y Ryan (1985); Erikson (1963, 1982); Jahoda (1958); Maslow (1954, 1968); Rogers (1951, 1961); Ryff y Singer (1996) y Vaillant (1977). Según Gancedo (2008), el cambio de enfoque desde la enfermedad al desarrollo de las potencialidades, podría denominarse enfoque salugénico. Él mismo comienza a visibilizarse y completar al modelo médico hegemónico que se encontraba vigente en la ciencia psicológica. Dicho autor describe el recorrido que va desde un enfoque al otro. El modelo médico se organizó desde y hacia la enfermedad. Diagnóstico, pronóstico, curación y prevención son los términos
principales de esta óptica. Este modelo luego se extendió a las Ciencias Sociales. Comenzó a manifestarse como insuficiente a mediados del siglo XX cuando la OMS, en 1947, destaca que la salud no es simplemente la ausencia de enfermedad. Posteriormente, en la década del 80, germina el concepto de promoción de la salud que anticipa el surgimiento del enfoque salugénico. Desde la promoción no se busca solo la evitación (prevención) de la enfermedad sino fundamentalmente el incremento de la salud y el bienestar en general (Godoy, 1999). En esta línea, Antonovsky (1979, 1987) desde el ámbito de la Sociología de la Medicina, postula la Orientación Salugénica viendo a la salud/enfermedad como extremos de un continuo más que como posiciones dicotómicas y se interesa por estudiar aquellos factores que promueven movimientos hacia el extremo favorable del continuo. De manera complementaria, Dunning y Stuhlmiller (2000) plantean que se trata de adoptar en lugar de un paradigma patogénico, un paradigma salutogénico o saludable para la conceptualización, investigación, diseño y aplicación de intervenciones efectivas para el
trauma o la adversidad. En síntesis, la psicología positiva busca aportar nuevos conocimientos para obtener una óptima calidad de vida y bienestar. Proporciona una nueva mirada, centrada en las cualidades positivas, identificando factores importantes para el ser humano como son el bienestar subjetivo, el optimismo, la felicidad y la creatividad. Como puede observarse a continuación, representantes de la Psicología Positiva destacan la importancia de la creatividad en el desarrollo vital.
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- Tesis de Grado [822]
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