Cyberbullying y sus modalidades en adolescentes de Balcarce y Tandil
Fecha
2015-06-24Autor
Circelli, Ludmila
López, Valeria Elizabeth
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Fue  primero  a  través  de  las  noticias  que  mostraban  los  medios  de comunicación, y luego a partir de las prácticas de Psicología Educacional, donde en contacto con escuelas pudimos constatar que el acoso escolar tan frecuente en países  del  primer  mundo,  es  padecido  también  por  los  alumnos  de  nuestra sociedad   con  graves  consecuencias  llegando,  en  algunos  casos,  a  la  muerte.
Al interiorizarnos en el tema pudimos observar que esta problemática no se presenta sólo  entre pares en el ámbito escolar; sino que las formas de maltrato y acoso se extienden también a la red a partir del uso de las nuevas tecnologías. El manejo  de  las  mismas,  que tantas  veces une  y  comunica  a  las  personas,  tiene también su lado negativo al utilizarse para molestar y  acosar a otros. Ortega, Mora Merchan  y  Jaguer  (2007),  mencionan  la  idea  de  Castells,  según  quien  “los comportamientos que se observan en Internet no son más que el reflejo de los que se producen en la sociedad” (p. 8).
Este fenómeno al  que  nos  estamos  refiriendo se denomina  Cyberbullying. Di Virgilio y Pirilo (2009) retoman la definición de Olweus, quien define el Bullying o Acoso Escolar 
(…)  como aquel comportamiento que puede o no implicar el contacto físico, pero  que  hace  que  el  bully  o  agresor,  en  forma  repetida  y  durante  un período de tiempo - al menos seis meses -  lleve a cabo acciones negativas hacia otro semejante (2009, p. 3);
2 A su vez,  debe haber un desequilibrio de poder o de fuerza,  y  el escolar que  está  expuesto  a  las  acciones  negativas  debe  tener  mucha  dificultad  para defenderse.
En  su  definición,  se  incluye  además  una  distinción  entre  dos  formas distintas de bullying: acoso directo en forma de ataques físicos y verbales; y acoso indirecto  o  acoso  centrado  en  las  relaciones  sociales  a  través  de  exclusión deliberada o el aislamiento.
En cuanto al Cyberbullying,  Ortega et al.,  (2007) exponen las posturas de Smith y Willard.
Smith lo define como una conducta agresiva e intencional que se repite de forma frecuente en el tiempo, se lleva a cabo por un grupo o individ uo mediante el uso de medios electrónicos, y se dirige a una víctima que no puede defenderse fácilmente  por  sí  misma.  Hay  que  señalar  que  esta  acción  es  sostenida  en  el tiempo.
En otro sentido, Wilard manifiesta que el Cyberbullying consiste en ser cruel
con  otra  persona  mediante  el  envío  o  publicación  de  material  dañino  o  la
implicación en otras formas de agresión social usando Internet u otras tecnologías
digitales. 
Desde las posturas de Smith y Willard puede hacerse una distinción dentro del Cyberbullying según:
-  Los  medios  que  se  utilizan  para  llevar a  cabo  estos  comportamientos:
mensajes de texto,  envío  de  fotos  o  videos,  llamadas  ofensivas,  correos electrónicos,  agresión  verbal  en  salas  de  chat,  mensajería  instantánea,  páginas
web,  o,
-  La  acción  desarrollada:  provocación  incendiaria,  hostigamiento, denigración,  suplantación  de  la  personalidad,  violación  de  la  intimidad  o  juego sucio, exclusión, cyberacoso.
En  el  presente  trabajo  tendremos  en  cuenta  la  distinción  realizada  por Smith  en  relación  a  los  medios  utilizados  para  llevar  a  cabo  acciones  de Cyberbullying,  ya  que  intentaremos  precisar  las  mismas  a  través  del  uso  de teléfono celular y de internet. 
Los estudios acerca del Cyberbullying se han desarrollado en varios países del mundo mostrando  diferente incidencia en cada uno debido al momento en el que  el  estudio  se  realiza  en  cada  país  y  al  grado  de  accesibilidad  a  las  nuevas tecnologías. (Ortega et al., 2007).
Específicamente en América Latina, un estudio realizado por Del Rio Pérez, Bringue  Sala,  Sadaba  Chalezquer  y  González  González  (2009)en  Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Venezuela, muestra que el 13,3% del total de los encuestados ha utilizado el celular para ofender a alguien y el 6,4% se ha sentido ofendido a través del celular. En relación al uso de Internet, el 4,4 % ha utilizado Messenger para perjudicar al alguien y el 5,6 % se ha sentido ofendido por este mismo medio.
Colecciones
- Tesis de Grado [822]
 
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